Originalmente publicada el 28 de mayo, 2012 en el blog coachingparatriunfar.wordpress.com
La primera vez que vi Enredados, la película que trata de la historia de Rapunzel, me impactó sobremanera la forma en la que Madre Gothel tenía a la pequeña Rapunzel totalmente trabajada, convencida de que era poca cosa, que no podía valerse por sí misma, que era tonta, ¡¡¡hasta gorda!!! Y cuando Rapunzel le dice que Flynn Rider está enamorado de ella, la madre le espeta en la cara esa frase que le da hoy título a esta escritura: “¡¡¡Mírate!!! ¿Crees que se impresionó?”. Desgraciadamente Rapunzel no tiene manera de ver en ella misma lo que en efecto tiene y que pudieron hacer que no solo Flynn Rider, sino los malosos de la taberna y más adelante el caballo Máximus e incluso la gente del pueblo se impresionaran y se enamoraran de ella: su encanto, su forma de ser.
Mucha gente está rodeada de Madres Gothel por todos lados, ya sea nuestros propios padres (porque los hay… uuuuy! Vaya que los hay!!!), maestros, compañeros de escuela y trabajo, jefes, parejas… gente que te dice con palabras o con actitudes que tu no vales, que tu no sirves, que tu no puedes hacer las cosas, que eres tont@, que eres fe@… Una coacheé me platicó que el hombre de quien se había enamorado le dijo “ya me di cuenta que tú no eres la mejor opción”, y se quedó durante 3 años con esa idea, la idea de no merecer, de no ser la mejor opción… y sin darse la oportunidad de tener otra pareja.
Estas creencias que otras personas nos siembran en la mente (totalmente a propósito, como Madre Gothel, o bien sin intención maligna), nos impiden muchas veces lograr nuestros objetivos. Rapunzel tenía un sueño, que era ir a ver las linternas flotantes el día de su cumpleaños, pero Madre Gothel le había dicho que el mundo era malo, perverso, que el único lugar donde ella estaría a salvo sería en la torre… y sin embargo cuando se decidió a salir de ella, ¡fue tan fácil! Mi coacheé estaba plenamente convencida que ella no era la mejor opción para nadie, y cuando se decidió a darse la oportunidad de tener novio, ¡hasta matrimonio le pidieron! Historias que escuchamos de gente que tienen mil años con la idea de iniciar un negocio, pero por miedos, por dudas, por gente que les dice “no la vas a armar”, “es dificil”, “hay crisis”, etc., no lo hacen, y cuando finalmente respiran hondo, cierran los ojos y se avientan… y les pega… ¡no bueno! Hasta dicen “¿porqué no lo intenté antes?” El día de hoy te pregunto: ¿cuál es el objetivo que no has podido lograr? Y si no lo has podido lograr, dime: ¿qué te lo ha impedido? Pon atención a lo que vas a contestar: “no tengo dinero”, “no puedo hacerlo”, “no se me da”, “soy muy mal@ para eso”, “nunca he podido”, “siempre la riego”… todo eso que contestaste a la pregunta “¿qué te lo ha impedido?”, ¿sabes que son? ¡¡¡CREENCIAS!!! Creencias que te limitan, son como techos que te impiden seguir escalando… ¿qué te hace pensar que todo eso que te dices es verdad? Puedes contestar “es que mi mamá me dijo..”, “es que mi papá…”, “un profesor en la primaria me dijo…”, “siempre que lo he intentado…” y un buen de etcéteras… todos ellos son tus Madre Gothel… el primer paso para romper esas creencias y poder avanzar hacia tu objetivo, es identificarlas, y ¡¡¡TE FELICITO!!! Hoy, en este ejercicio que hicimos tu y yo, ¡ya las estás identificando! Pero el asunto no acaba ahí, ¿estás de acuerdo? No hay solo que identificarlas, ¡¡¡hay que ROMPERLAS!!! El coaching es una herramienta que te ayuda a descubrir en ti todos esos pensamientos que te frenan, pero sobre todo te ayuda a romper con todos ellos y lograr sacar de ti todo el potencial que tienes… ¡¡¡Y LOGRAR TUS OBJETIVOS!!! Atrévete a intentarlo, y a llegar a ser la mejor versión de ti mismo. ¡LIBERATE! ¿Quieres saber cómo? Da CLICK AQUI y obten una sesión totalmente gratuita conmigo!
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