La semana pasada te escribí sobre el mito del empresario RESOLVEDOR de todo, el mito del empresario SUPERHÉROE, el mito del empresario que todo lo sabe y todo lo puede, el que nunca se quiebra… y te hablaba de lo tremendamente peligroso que puede ser luchar por sostener esta careta, tanto para la salud de la organización como la del propio empresario. Y te escribía que un empresario no tiene por qué ir por la vida luchando solito. Él también requiere de un círculo de apoyo.
Esta semana quiero charlar contigo sobre algo que llamó poderosamente mi atención. Hoy salí a hacer mi entrenamiento de caminata y elegí como compañía el podcast de Marisa Lazo. El episodio que escuché el día de hoy compartía varias ideas, pero la que más me enganchó fue, sin duda, la que le da título a nuestra entrada de esta ocasión. Ella decía que un líder debe de generar confianza en su equipo de trabajo para que, en algún momento de crisis, pueda contar con ellos. Y me llamó poderosamente la atención por la manera en la que describe el impacto de la confianza al interior del equipo.
No pude evitar recordar que en mi libro DE JEFE A LÍDER COACH, retomo lo que dice Stephen Covey acerca de la cuenta bancaria emocional y que es fundamental fomentar la confianza, ya sea con tu equipo de trabajo, con tu pareja, con tus hijos. Si la confianza se pierde, ya valió toda la relación. Y como líder, créeme, te sale mucho más barato generar un ambiente de confianza y constituirte como alguien confiable, que tratar de recuperar la confianza perdida.
Sin duda la confianza es un ingrediente primario en la fórmula de un equipo ganador. No por nada la confianza es una de las cuatro “C” (de hecho, la primera) para convertirte en Líder de tu Equipo, de acuerdo con mi metodología 3L, y es muy simple: si tú no confías en tus colaboradores, no vas a permitir que hagan lo que saben hacer (o para lo que fueron contratados). Si tus colaboradores no confían en ti, harán como que trabajan, al fin que la empresa hace como que les paga. No tendrás de ellos su creatividad, su compromiso, su lealtad.
Pero no te estoy hablando de confianza fingida, ni, como decimos en México, llamarada de petate. Tiene que ser auténtica, genuina y permanente, para que sea bien recibida. Tiene que ser parte de ti y de tu personalidad. Es mucho más redituable un líder congruente, transparente, honesto, a ser una persona que maneje doble agenda, que tenga caretas, que lo que hace no es para nada lo que dice. Recuerdo hace muchos años al dueño de un colegio que me contrató para trabajar con su equipo de profesoras porque había ruptura, no había compromiso, había un clima espantoso al interior… tuvimos un par de sesiones y en algún momento me entero de la realidad: las maestras estaban muy desmotivadas y emocionalmente desvinculadas del trabajo porque el dueño del colegio (el que me contrató) estaba teniendo un affaire con una de las profesoras y era un secreto a voces. El equipo estaba totalmente fracturado porque el “líder” era incongruente, no era nada confiable. Si era capaz de romper la confianza de la mujer que más decía amar, qué les esperaba a ellas que eran simples colaboradoras…
Confía en tus colaboradores, te sorprenderás de todo lo que son capaces de hacer, crear, innovar, simplemente con un poco de confianza y respaldo de tu parte. Pero también, sé una persona confiable, sé congruente, sé íntegro. Cuando el jefe es íntegro, el equipo se compromete hasta la médula, no hay rotación ni fugas de talentos, no hay boicot al interior, ¡por el contrario! Encontrarás que las personas de tu equipo se sienten tan parte del mismo que se casan con tu proyecto, se casan contigo y van a darlo todo por ti, porque sienten que tú lo das por ellos.
La mejor inversión que puedes hacer es cuidar a las personas que componen tus equipos (y no nada más de trabajo, ¿ehe? Extiéndelo a tus hijos, a tu pareja, a todos tus círculos), y la mejor manera de cuidarlos, sin duda, es siendo TU una mejor persona, un mejor líder. No eres un producto terminado. Tu verdad no es LA verdad. Date el chance de desaprender y reaprender nuevas herramientas. Albert Einstein decía que “locura es hacer lo mismo esperando resultados diferentes”. ¿Quieres resultados diferentes? ¡Haz las cosas diferentes! Empieza por el hombre o la mujer que te devuelve el espejo. Empieza por ti. ¡Y yo te puedo ayudar con ese proceso! Agenda una sesión totalmente gratuita y juntos veamos si yo soy la mejor opción para guiarte en este camino. Da click aquí y empieza a transformar tus paradigmas de liderazgo ¡de una vez por todas!
Adriana Alanis es coach, formadora, entrenadora y mentora de empresarios, gerentes recién ascendidos y mandos medios con más de 15 años de experiencia. Creadora de la Metodología 3L: Liderazgo de tu Vida, Liderazgo de tu Equipo y Liderazgo de tu Productividad. Autora de los libros DE JEFE A LIDER COACH y LOS TRES LIDERAZGOS DEL GERENTE EXTRAORDINARIO, creadora de la Agenda del Líder Disruptivo y del programa MUJER LIBRE Y GRAN-DIOSA. Profesora universitaria con más de 20 años de servicio y vicepresidenta COPARMEX Hidalgo, Premio Nacional a la Mujer 2020 y Galardón Forjadores de México 2021. www.adrianaalanis.com