¡¡¡Estamos estrenando año!!! Y en este primer lunes de mes, quiero compartir contigo algo muy especial, el cómo lograr, ¡por fin! cumplir tus (siempre repetidos, pero nunca logrados) propósitos de año nuevo.
Y es que nos encantan los inicios de ciclo, ¿si o no? Recuerdo mucho que mi primer día en la licenciatura, me hice una promesa a mí misma y dije “a partir de ahora soy alguien popular y tendré muchos amigos”, ¡y lo cumplí! Incluso nuestros lunes son un pequeño inicio: “el lunes empiezo…” o igual y utilizamos nuestros cumpleaños para iniciar un nuevo ciclo, y “a partir de mi cumple voy a dejar de…”. Yo personalmente soy fan de iniciar y cerrar ciclo, sí en año nuevo, pero más más más, ¿adivina? En Semana Santa… como que tomo el domingo de resurrección como un RESURGIR a una nueva vida (por eso hasta me desconecto todo el Triduo Pascual)… y ¡por supuesto que en inicio de año! Solemos decir “a partir del 1 de enero, voy a hacer…” pero, por muy buenas intenciones que tengamos… neta… ¿qué es lo que nos impide lograr nuestros propósitos de año nuevo?
1) porque son los mismos de siempre: hacer ejercicio, bajar de peso, dejar de fumar. Son simples intenciones que no tienen ni siquiera una estructura correcta. En este aspecto, si ya los tienes más que reciclados, es momento de soltarlos, porque es como la ropa: si no te la has puesto en 6 meses, ya no te la vas a poner y mejor sacarla.
2) porque son lo que quieren de mi, pero no son lo que YO QUIERO DE MI. ¿de verdad quiero bajar de peso? ¿O es porque mi mamá me está duro y dale “ya ponte a dieta”? Es super importante que veas qué es lo que quieres TU de TI para TI, algo que realmente resuene contigo. Si tiene significado para ti, encontrarás la manera de hacerlo. Si no resuena, sobrarán los pretextos.
3) ¡Son super ambiguos! Y no me dan la claridad que requiero para llevarlos a cabo. Y la ambigüedad nos mantiene en la zona de confort. Ponle nombres, cantidades, fechas… sé muy pero muy específico, cuando le das especificidad, ¡a tu propósito le sale un cohete propulsor!
Pero ya estuvo bueno de puros “por qué no” logras tus propósitos y vamos a los “cómo sí”.
- Ponte solo tres. Eso de propósito por campanada no hace más que abrumarnos. Pero si solo te enfocas en tres propósitos, será mucho más fácil y ligero para ti.
- Da “baby steps”, o sea, pasitos de bebé. Dice Brian Tracy que un elefante se come a bocaditos. Así que no quieras irte a corre un maratón mañana si tu sillón ya tiene tu forma de tanto tiempo que pasas ahí. Empieza por pequeñas acciones que sí puedas hacer y te den esa sensación de logro.
- Una estrategia que me encanta es “vincula un nuevo hábito con un hábito que ya tienes”, por ejemplo, a mi me costó mucho trabajo integrar el tomar agua. Y vinculé ese hábito a varios más: en cuanto me despierto, me lavo los dientes y después me tomo dos vasos con agua tibia, también cuando estoy haciendo ejercicio, tomo agua en cada descanso entre series y finalmente, me compré un vaso muy grande y vistoso, con popote integrado y ese lo tengo en mi oficina y estoy tomando agua.
- Hablando del vaso grande y vistoso: sé congruente con tus propósitos. Si tu propósito es bajarle al azúcar, ¡por piedad! ¡Deja de inundar tu alacena con galletas y dulces! Actúa con congruencia.
- Y finalmente, y creo el más importante: sé compasivo contigo mismo. Si fallaste, no te autocritiques ni te maltrates. Simplemente vuelve a iniciar. Créeme que mucho tiene que ver el que no cumplas tus objetivos con la manera con la que te hablas a ti mismo. ¡Conviértete en tu mayor porrista! ¡Celebra tus logros! (pero con celebraciones acordes a tu propósito ¿ehe? No vayas a celebrar tu primer día de gym con la super hamburguesa y papas fritas).
Estamos en un momento mágico y maravilloso, lo que la ciencia ha denominado el EFECTO DEL NUEVO COMIENZO. Aprovecha la efervescencia y apaláncate de las estrategias que te compartí para lograr integrar esos tan anhelados nuevos hábitos que te van a ayudar a alcanzar tu mejor versión. Y si ocupas ayuda, solicita una sesión totalmente gratuita para juntos, crear un plan de trabajo, simplemente da click aquí. ¡Feliz año nuevo!
Adriana Alanis tiene más de 15 años de experiencia como desarrolladora de líderes: coach, formadora y mentora de empresarios, gerentes recién ascendidos y mandos medios Creadora de la Metodología 3L: Liderazgo de tu Vida, Liderazgo de tu Equipo y Liderazgo de tu Productividad. Autora de los libros DE JEFE A LIDER COACH y LOS TRES LIDERAZGOS DEL GERENTE EXTRAORDINARIO, creadora de la Agenda del Líder Disruptivo y del programa MUJER LIBRE Y GRAN-DIOSA. Profesora universitaria con más de 20 años de servicio y vicepresidenta COPARMEX Hidalgo, Premio Nacional a la Mujer 2020 y Galardón Forjadores de México 2021. https://bit.ly/adrianaalanis